Ahora bien, un estudio realizado en Estados Unidos ha demostrado que la toma de antibióticos durante el primer año de vida tiene un impacto sobre el riesgo de desarrollar una alergia alimentaria.
Comparando las prescripciones de antibióticos de niños alérgicos y no alérgicos, los investigadores observaron que los niños que padecían alergias alimentarias habían recibido más antibióticos a lo largo del primer año de vida que los niños no alérgicos.
En efecto, la administración frecuente de antibióticos afecta a la microbiota intestinal, actor importante en el desarrollo del sistema inmunitario y de la tolerancia a los alimentos1.
Explicaciones :
La alergia alimentaria es un conjunto de reacciones inmunitarias anormales (cutáneas, digestivas, etc.) que se producen después de la ingesta de un alimento concreto.² Cuando la tolerancia se desarrolla correctamente, la respuesta inmunitaria está regulada y no se produce ninguna alergia alimentaria.
¡Por lo tanto, es bueno recordar que " los antibióticos no deben ser de prescripción automática " !