Utilización ancestral
Las propiedades terapéuticas del regaliz se conocen desde la Antigüedad, en que se utilizaba para el asma y las úlceras. El nombre latino glycyrrhiza procede de glycys, «azúcar», y rhidza, «raíz», es decir, «raíz dulce». La medicina china la considera una hierba que regula las funciones del estómago y refuerza la energía vital. El regaliz también se utiliza ampliamente con fines alimentarios.
Botánica
El regaliz es una planta vivaz, originaria del sudeste de Europa y de Asia Occidental, que crece espontáneamente en los prados. Las inflorescencias están compuestas por racimos de flores, de color lila, que dan lugar a pequeñas vainas.
El regaliz posee partes subterráneas muy desarrolladas, de color amarillo y de sabor dulce.

Propiedades
La raíz de regaliz se utiliza tradicionalmente para tratar los trastornos digestivos (dolor de estómago, colitis). Estudios recientes han demostrado que la glicirricina, constituyente principal, es responsable de su acción hepatoprotectora1 y que los polisacáridos inhiben la adhesión de Helicobacter pylori a la mucosa del estómago2, limitando así la aparición de úlceras gástricas.
Sus activos le confieren también propiedades antiinflamatorias3 y antivíricas4. Por ello, el regaliz puede recomendarse en caso de dolor de garganta, faringitis o gripe.
Indicaciones
- Inflamaciones gastrointestinales (gastritis)
- Prevención de las recidivas ulcerosas
- Anginas, faringitis
Posibles asociaciones
Regaliz + Melisa:
dolor gástrico, prevención de las recidivas ulcerosas.

Regaliz + Equinácea:
anginas víricas, faringitis.

Precauciones de empleo
Contraindicada en caso de insuficiencia renal grave, hipertensión, hipopotasemia, hipertonía, en la mujer embarazada o lactante y en el niño, por falta de datos.