Fatiga irritabilidad calambres nocturnos temblores en los párpados o también palpitaciones… Estos síntomas conocidos por gran parte de la población revelan un déficit de magnesio.
Mineral indispensable para el buen funcionamiento del organismo el magnesio está implicado en más de 300 reacciones biológicas. Transmisión nerviosa relajación muscular y protección de las membranas celulares forman parte de estos ámbitos de intervención.
A lo largo de la vida, las necesidades de magnesio evolucionan. La Organización Mundial de la Salud recomienda un aporte medio de 6 mg por kilogramo y por día. Los lactantes los niños los adolescentes y las mujeres embarazadas tienen necesidades diarias que pueden llegar al doble o al triple para un buen crecimiento y un buen desarrollo del sistema nervioso.
En Francia, el 75 % de la población presenta una carencia de magnesio. Las razones son diversas toma de medicamentos dietas adelgazantes agricultura intensiva que empobrece los suelos ritmo de vida acelerado.
El estrés también es culpable del déficit de magnesio y genera un círculo vicioso :
- El estrés produce automáticamente una pérdida de magnesio que se elimina por la orina.
- Esta pérdida aumentada de magnesio empeora la ansiedad y el estrés lo cual produce más eliminación.
Para optimizar el aporte de magnesio se recomienda aprender :
- a gestionar el estrés con el yoga o la sofrología, por ejemplo.
- Privilegiar el agua mineral y los alimentos ricos en magnesio como almendras nueces y avellanas chocolate arroz y pan integral gambas…
Además de la alimentación la toma de suplementos alimentarios ricos en magnesio puede ser útil.
- Opte por los que contienen vitamina B6 que ayuda al magnesio a entrar en la célula.
- Algunos complementos alimentarios contienen taurina que ayuda a mantener el magnesio en la célula. Un aporte de magnesio controlado ¡aporta auténticos beneficios para la salud!