Se encuentran en el intestino
- los pulmones
- la boca
- la vagina
- y la piel.
Somos seres llamados simbióticos mitad humanos, mitad microbios.
Desde 2006, está en marcha una auténtica revolución.
Cada vez más estudios muestran una correlación entre la microbiota intestinal y diversas enfermedades.
Estas investigaciones han permitido abordar de otra manera la obesidad
- la diabetes de tipo 2
- las alergias
- la enfermedad de Crohn
- las enfermedades inflamatorias del tubo digestivo y del hígado
- las enfermedades cardiovasculares, neurológicas
- y los trastornos ansioso-depresivos.
Instalada en un 80 % hacia los 2 años de edad y definitiva entre los 3 y los 5 años la microbiota intestinal es un órgano de pleno derecho.
Protege al organismo velando por el buen desarrollo del sistema inmunitario y participa en el control de las reacciones inflamatorias.
Favorece la degradación de las toxinas y protege el cuerpo de las bacterias patógenas.
Participa en la digestión favoreciendo la absorción de los nutrientes y sintetizando las vitaminas B y K, esenciales para la nutrición.
Además, influye en algunas emociones.
Si está sana, la microbiota intestinal está en eubiosis es rica y diversificada.
A veces, se desequilibra y se vuelve pobre se habla entonces de disbiosis.
Infecciones digestivas, alimentos mal tolerados, medicamentos o estrés, las causas son diversas.
Cuando la microbiota intestinal está en disbiosis se altera la permeabilidad del intestino y se produce dolor articular alergias
o migrañas.
Para mantenerse sano es necesario cuidar la microbiota.
Los probióticos son microorganismos vivos que, una vez ingeridos en cantidad adecuada tienen un efecto beneficioso para el huésped.
Los probióticos bien elegidos como complemento de la alimentación mejoran la calidad de la microbiota y ayudan al intestino a cicatrizar.
Pero no olvidemos lo esencial una buena alimentación basada en un modelo de tipo mediterráneo rica en vegetales, ayuda a combatir potenciales enfermedades.
Estos alimentos ricos en prebióticos serán útiles para el crecimiento de las bacterias beneficiosas.
