La fitoterapia ocupa un lugar en la práctica médica actual. Puede constituir, para los males más corrientes, una alternativa al tratamiento alopático y también puede, en numerosas situaciones, complementarla para mejorar su tolerancia o aumentar su eficacia.
En los trastornos de la vida cotidiana
Los trastornos del sueño
La fitoterapia puede constituir muy a menudo un recurso de primera intención en los trastornos del sueño.
El insomnio es un trastorno frecuente, que afecta del 9 % al 15 % de la población general en el mundo. En la asistencia primaria, el tratamiento del insomnio consiste generalmente en medicamentos hipnóticos.
Los efectos secundarios de estos tratamientos son bien conocidos: trastornos de la memoria y del comportamiento, mayor riesgo de caída en las personas de edad avanzada y desarrollo de tolerancia, que requiere dosis más elevadas para obtener el resultado deseado y desemboca en una dependencia.

Las enfermedades ORL o respiratorias
En las enfermedades ORL o respiratorias corrientes, como las anginas, el catarro o la bronquitis, las plantas constituyen también un tratamiento de primera elección para aliviar los síntomas y limitar la sobreinfección bacteriana
En este contexto, la equinácea es imprescindible. A sus propiedades antivíricas y antibacterianas bien demostradas, se añaden las propiedades inmunomoduladoras confirmadas por numerosos estudios. El ciprés y el saúco también tienen una acción antiinflamatoria y antivírica potente, origen de su empleo en las infecciones invernales. El pino silvestre, antiséptico y mucolítico, es la planta principal de las afecciones respiratorias con tos productiva. En cuanto al llantén, sus propiedades antiinflamatorias y antitusivas hace tiempo que se utilizan para tratar las afecciones broncopulmonares.

Los trastornos digestivos
En los trastornos digestivos, algunas plantas como la alcachofa, el rábano negro, la fumaria, la melisa o también el diente de león mejoran las secreciones digestivas y la motilidad gástrica. La alcachofa y el rábano negro, utilizados desde la Antigüedad para mejorar la digestión, contienen principios activos que regulan la secreción biliar y desempeñan un papel importante en la desintoxicación hepática. Los efectos calmantes y antiespasmódicos de la melisa, puestos en evidencia en numerosos estudios, la convierten en una planta utilizada desde hace mucho tiempo en el dolor de barriga y los espasmos abdominales, en especial relacionados con el estrés.

El dolor agudo o crónico
Para aliviar el dolor agudo o crónico y reducir el empleo de los antiinflamatorios clásicos, se puede optar por el sauce o la reina de los prados, o también por el harpagofito, la escrofularia, la cúrcuma o la grosella negra. El sauce y la reina de los prados contienen derivados salicilados, precursores de la aspirina. Las virtudes medicinales de la grosella negra, antiinflamatoria y protectora de las articulaciones, ya se describieron en el siglo XVI. La cúrcuma se utiliza desde hace milenios en Asia por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. El harpagofito, que contiene harpagósidos con propiedades antiinflamatorias y analgésicas, se utiliza en los estados inflamatorios agudos o crónicos de las afecciones osteoarticulares.

En asociación con el tratamiento alopático
Las plantas tienen numerosas indicaciones como complemento de un tratamiento convencional. Por ejemplo, asociadas a los somníferos para disminuir sus dosis y facilitar la deshabituación, o como complemento de un tratamiento antidepresivo para mejorar su eficacia e incluso disminuir las dosis.
En prevención, pueden ayudar a reducir las recidivas de la úlcera gastroduodenal, como la regaliz, que frena las secreciones gástricas y contiene polisacáridos que inhiben la adhesión de Helicobacter pylori a la pared del estómago.
El arándano rojo se utiliza e incluso lo recomiendan las autoridades sanitarias para prevenir las cistitis recidivantes.

Fuentes :
- Jacques Fleurantin (2013) Du bon usage des plantes qui soignent. Editions Ouest-France.
- Eric Lorrain (2019) Grand Manuel de phytothérapie. Editions Dunod.
- Jean-Pierre Théallet (2016) Le guide familial des plantes qui soignent. Editions Albin Michel.
- Documentación del Instituto Europeo de Sustancias Vegetales : « Les plantes médicinales 2016-2017 ».
- « Cystite aiguë simple, à risque de complication ou récidivante, de la femme » HAS 2016.